Fiscalidad progresiva

Desde el Partido Socialista entendemos la fiscalidad como un instrumento fundamental para la financiación del Estado de Bienestar y la inversión pública. Un sistema fiscal que debe ordenarse bajo los principios de eficiencia, progresividad y suficiencia, de tal forma que genere los recursos necesarios para el funcionamiento de unos servicios públicos de calidad.

Nos comprometemos, en este sentido, a mejorar el sistema tributario para hacerlo más justo y eficiente. La nueva fiscalidad que proponemos promoverá la transformación del modelo de crecimiento y la creación de empleo, reduciendo las cargas administrativas innecesarias, y focalizando los incentivos fiscales y el gasto público, en el apoyo a la innovación y a los emprendedores. En el año 2004, nos gastábamos casi el doble en deducciones fiscales a la compra de vivienda que en I+D+I; ahora es justamente lo contrario. El primero es el modelo de desarrollo del ladrillo que el PP sigue defendiendo con su vuelta al 96, el segundo es el modelo del conocimiento y la sostenibilidad que defendemos desde el PSOE

No es lo mismo PP que PSOE

Nos enfrentamos a dos modelos de entender la fiscalidad claramente diferenciados. El que defiende el PP, basado en una reducción generalizada de impuestos, que beneficiaría a los que más tienen y que, además no es compatible en estos momentos, con el compromiso de reducir el déficit público y no poner en riesgo la sostenibilidad de nuestro Estado de Bienestar y nuestra capacidad para invertir en la recuperación y el empleo.

Mientras, desde el Partido Socialista, apostamos por una mayor progresividad y un tratamiento más equilibrado en la relación entre las rentas del trabajo y del capital. No es lo mismo defender un impuesto sobre las grandes fortunas y un impuesto sobre los beneficios de la banca, como hace el PSOE, para contribuir a financiar medidas encaminadas a favorecer la creación de empleo y la protección social, que prometer una rebaja de impuestos, beneficiando a los que más tienen, a costa de reducir los pilares básicos de la protección social, y perjudicando a los que menos tienen, como pretende hacer el PP con el programa oculto de Rajoy.